jueves, 20 de enero de 2011

Pequeños Trozos De Sueño.



Éste nuestro pequeño gran pedazo de realidad, nuestro pequeño gran trozo de sueño enmedio de un cachibache de utopía que nunca se termina de realizar.


¿Por qué dejaste de inventar despedidas? ¡Yo soy tan feliz contigo!


-cállate! Eso es pasado, yo ni siquiera me acuerdo de haberte dejado


-supongo que siempre fue así, en realidad nunca me recordaste, jamás pensaste en mi, y yo que me volví tan huraña y definitivamente de nada sirvió todo lo que nos pasó, y ahora ¿para dónde voy?


-¡Lo tengo!


Iré al sitio en el que te encontré, a ese pequeño tiempo, a aquella ocasión ancestral en dónde me besaste, me quedaré ahí hasta que regreses, puede que nos volvamos a encontrar.


¿Puede?, es mejor que esperes, porqué siempre será así.


Hoy tengo ganas de escribirte a ti, al dulce tiempo, a las picaras manías que me dejaste, a las risas apenadas, a la expresión de temor, nerviosismo y felicidad cuando me tomas la mano.


Mi amor, cielo infinito de ilusiones amarillas, azules, verdes, rosas, bicolor, eres un arcoíris traslúcido que puedo atravesar!


Tocarte para mí significa resucitar en un escondrijo diáfano de sentimientos, si me quieres volver a ver, búscame en el muelle aquel, en el que nos sentamos cada abril, búscame cuando quieras volver a escucharme suspirar, cuando mires mis ojos y te des cuenta de que ya no he llorado, que el tiempo es una delicia y un lujo que dejé de desperdiciar.


Mira! Mira! ¿Ya viste que tan rápido corren las mariposas? Sonríen de vez en cuando mientras las gacelas no paran de volar.


No me mires así vida mía! Es que mi mundo siempre fue tan diferente, las comisuras de tu vientre son un pedazo de nube en el que me puedo recostar, tus manos siguen siendo brazas de fuego que incendian mis tórridas noches de hielo.


En mi impaciente prisa por querer agrandar mi espacio, resulta que prefiero disfrutar los pequeños tiempos que tan bien nos hacen, los inventos que disfrazamos de realidad para poder tener un poco más uno del otro.




Y es que contigo mi mundo es fantástico, es delirio y químera, frágil y burdo, una melodía que se arrincona en mis oídos hasta que se revuelve en mi ombligo, una pequeña y delicada estrofa llena de versos bien escritos dirigidos a ti.


Palabras dulces y discretas, que disfruto lentamente, esta vez, no inventaremos despedidas cuando tengas que marcharte, esta vez nos diremos un “hasta pronto” porque siempre nos hemos de reencontrar.


Un maremoto de luces viene corriendo del horizonte, una peineta para mi corto cabello y un adorno para mi trenza, despéiname, anda! Anda! Enrédame el cabello, y luego vuélveme a peinar, me encanta sentir tus dedos entre mi cabello, me haces cosquillas que llegan hasta el estómago, amo sentirte, así de nuevo, cada noche, jugando y revoloteando alrededor mío.


¡Música Francesa Para todos! Yo invito! Hoy tengo el contagio de la risa! Hoy me desperté de manera singular, brincando, despertando a todo el mundo, con el vals del ayer.


Eres mi pequeña entelequia, revuelta de amnesia, a veces se me olvida lo afortunada que soy de tenerte, y déspues me pongo a recordar todos esos pequeños momentos frágiles que nunca han dejado de pasar.


Mis pequeños placeres aumentan para compartírtelos, todo tú en este mi inigualable mundo, fácil, asequible, elemental, simple, fino, delgado, individual, natural, sobrio, discreto, mondo, lirondo, solo, mero, neto, franco, campechano, sincero, directo, claro, evidente, inocente, ingenuo, humilde, afable, espontáneo.


En este mi pequeño universo-inverso en el que te fumas mis pulmones y yo me bebo tu sonrisa; En este mundo ya no fumo, ahora respiro, ya no bebo ahora me desintoxico.


Que enorme dicha! Te la compro, porque puedo hacerlo y me la regalo por el placer de hacerlo.


¡ERES INMENSO! ¡PEQUEÑO TABÚ DE MI ALMA!


Eres el todo revuelto de nada, anídate aquí, absorve mis sueños inventándome realidades embriagantes, Eres mi sentimiento escondido, la parte blanda que guardo en un impenetrable cofre.


Subamos al horizonte y demos una mordida al cielo, derritamos las ansias de vernos, trepemos al universo por una escalera grande, la que hemos construido gracias a tanta ilusión, al menos nos hemos inventado la manera de estar juntos viviendo dispersos en el sentimiento.


¡Ríe, ¿vez lo sencillo que es inventarte? Hoy no te veré lejos, hoy iremos a caminar, meteremos las manos en los bolsillos del mar y correremos por todo lo largo de su columna vertebral, hoy me revolcaré en la arena suelta de un día común.


Pequeño tiempo que convierto en espacios repletos de mi, y de ti, eternizados abrazos que duran instantes prolongados, en los que cerramos los ojos y aún estamos con vida, estas nuestras vidas arrebatadas que aún se desprenden del alma para correr tras de ti, tras de mí.


Hoy escucharemos melodías que nos inmortalicen, hoy estás a un lado como cada día, hoy te cociné un pay con pequeños trozos de nuestros sueños, hoy te contaré el último cuento del mes, mañana prometo escribirte uno nuevo que duré 40 días y 40 noches.


¿Lo ves? Seguimos caminando, nunca soltaremos el juego de ingeniar en un sueño un escondite que nos resguarde del tiempo, hoy creamos una realidad insustituible que dure lo que tenga que durar, aunque el mundo verdadero se disuelva a nuestro alrededor.


Algún día me desvaneceré enfrente de ti, desapareceré como la aurora que envejece en la mañana.


¿sabes que día terminará nuestro pedazo rescatado de sueño?
¡Cuando dejes de inventarme y de imaginar junto a mí!

lunes, 6 de diciembre de 2010

Salto y Me Desvanezco.


Y ella, saltó, saltó y se desvaneció.


¿Qué? Sí, se desvaneció, toda, no por Partes


¿Qué DEMONIOS? ¿Ahí termina su vida? Si, ahí terminó ¡Diantres!, no puede terminar ahí, ¡vamos! No puede terminar la historia.


¡Espera, nunca dije que terminó la historia, dije que ahí terminó su vida. De atrás para adelante, ¡ven, demos un último paseo!, definitivamente no puedo seguir tomando café, me pone nervioso y siempre me he de quemar la lengua.


Escucha, la verdad es que ella era pelirroja, y a veces morena, aunque yo siempre la ví “Azul”


¡Lástima de vida!
¡Astuta muerte! que sigue rondando
¡Uno por uno mis pasos despistados
¡Rápido! Rápido! Córtame las uñas que tengo la cara desangrada
¡Además, dicen que los acrósticos son los únicos que no entienden juicios ni razones, la verdad para variar es que todo radica en una mera desilusión- Se repetía mientras dormía.


Lo ha hecho, por fin te dejaste la greña larga, siempre me decía lo mismo ¿sabes? A veces cuando lo corto, necesito decirle adiós, estas jodidas liendres no me dejaban respirar; te decía que:


La mitad de su vida, viajó por el mundo, conoció niños, hombres, mujeres, pelotas, paletas, música y coleccionaba caminos, era como una máquina reproductora de recuerdos.


Me gustaba tanto verla quitarse el maquillaje, porque cuando lo hacía, podía oler el aroma natural de su piel, y el color azul nacarado de sus ojos me dibujaba una sonrisa que podría durar semanas, antes de que ella saltara, unos 7 días antes, me preguntó que si podía comprarle una noche y que tenía la ilusión de que yo y solo yo, le regalara la penúltima noche del mundo.


Ella quería esa noche, con todas sus estrellas, con todas sus sombras, con las bancas de los parques, con los besos despistados y las arrugas de los ancianos.


¿La penúltima noche? Y ¿por qué no la última? Ah! porque la última noche ya me la había regalado ella, desde el inicio, en el primer día que la vi.


Sí, lo sé, suena extraño pero la verdad no podía negarle nada, sobre todo cuando tenía esa sonrisa, verla escribir, verla bailar, y su obsesión por los viajes en carretera, a veces se sentaba en la ventanilla a dibujar estrellas con la punta de sus dedos, le gustaba tanto jugar ajedréz con las gotas de lluvia que caían en el parabrisas.


Realmente ella era la interesante, mi vida solo era un cajón con agujeros y al conocerla comenzó a llenarme, ella me pintaba figuras en la espalda, ella me levantaba con un beso en las mañanas y corría en calzones por toda la casa, ella era mi todo, el inicio de la historia y yo solo era los puntos suspensivos, si ella no estaba me mantenía inmóvil, porque ella proyectaba la fuerza de mis pasos.


Una noche me enfermé, y cuando me recuperé, sufrí otro accidente, creo que el exceso de alcohol provocó todo, estuve un año en el hospital y ella llegaba los 8 días de la semana.
¿Has dicho 8 días? Sí, es que ella era tan creativa y diferente que se inventaba, horas, minutos, días y años con el afán de mantenerse más tiempo cerca de mí.


¡Dios! No puedo continúar! ¡La extraño tanto! ¡Tanto!


¿Pero por qué saltó? ¿Por qué lo hizo? Si me has contado lo mucho que se amaban, así que ella solo saltó sin importarle tu sufrimiento? ¿No le importó la vida que destrozaba al suicidarse?


-Nunca lo he comprendido, solo lo hizo y listo, era tan impulsiva y a la vez tan metódica, ella tocaba el violín y sus dedos acariciaban las cuerdas, así como lo hacía con mi alma, después de mi accidente, enfermé nuevamente de gravedad, no recuerdo mucho, pero fué como abrir y cerrar los ojos al mismo tiempo, pero de manera muy extraña, cuando reaccioné, lo comprendí todo, ella no estaba, ella se había marchado.


¡Mi habitación desocupada, no había maletas ni ropa, ni agua ni comida y yo estaba atado a mi cama y con las luces apagadas, todo iba mal, yo no comprendí en dónde estaba ella, lo último que supe después de varios días es que estaba en el muelle, en el mismo en el que nos conocimos una tarde de invierno.


Cuando supe en dónde estaba, me solté como pude y corrí hacia dónde se encontraba, le grité con desesperación, pero no me escuchaba, al ver que tenía todas las intenciones de saltar la jaloneé pero ella se zafó, se quedó callada y con lágrimas en sus mejillas, gritó: ¡TE AMO!, y déspues de eso un silencio, déjame decirte amigo que esa frase fue lo más doloroso que me había dicho, así que simplemente saltó.


¡Sigo sin comprender, ¿porque saltó? ¡vamos con todo respeto esa mujer tenía que estar mal de sus facultades para dejarle inmóvil y atado de manos.


No amigo, no le he dicho, Ella, saltó, ¡porque yo había muerto meses antes!
Enfermé de la peste del insomnio y sorpresivamente fallecí, ella vivió 7 meses cerca de la playa, pero no pudo más.


¿Sabes de alguna otra cosa que sea peor que la muerte?
¡No, yo creo que nada, ¿Por qué?
¡Porque si la hay, ¡Vivir a medias!Ese dolor en las costillas cuando respiras y te das cuenta de que sigues asfixiándote, cuando yo morí, ella saltó para estar conmigo, y saltó y saltó y ahora viene en camino.


-Dicen que el silencio es la voz de lo incomprensible, yo digo que lo incomprensible ya me es tan indiferente.


¡Dicen que la vida nos lleva de la mano directo hacia la muerte, yo pienso que si se asoma, es para enseñarnos que si no morimos, jamás comenzaremos a vivir.


¡Desde ese día, Salto y me desvanezco para morir las veces que sean necesarias!

sábado, 13 de noviembre de 2010

-Y Conocí A Una Mujer-





-De sentimientos muy despiertos y de cintura ladina, una marejada de añejos amores que revuelcan mi impaciencia, pero al final del día llega corriendo a mis brazos como niña asustada, despistada, asombrada por las verdades que nadie quiere saber.

La conocí una noche interesante, entre letras y despistes sociales, entre imágenes sin euforia y una interminable noche de horas sin sueño.

Y conocí a una mujer, que me quitó la ropa de un tajo sin siquiera tocarme, que se volvió mi “Eva” atemorizándome con una cruel manzana, y la muy orgullosa se pasotea sobre mis labios sabiendo que me adormece las anginas.

Como adicción en pleno invierno, como letras insaciables que no se detienen ante una primera noche, y me escondo entre sus caricias para no tener que añorarle, y de entre todas las penitencias que llevo cargando sobre los hombros ella es la carga menos pesada.

Y de todos los lugares que he recorrido, solo hay uno al que deseo regresar, es incipiente de entre toda la variedad pero a mí me “place” tanto estar ahí, callada, encerrada, resguardada del mundo que me persigue, ella me mantiene a salvo de mi tragedia y me vuelve a poner de carnada en un segundo.

Y si tan solo tuviera un poco de clemencia, no me vería en las noches con el mismo afán de continuar, porque es ahora más que ayer un “mal necesario” porque tengo una atadura irritante que no me hace mella, y que día con día voy disfrutando más.

Ella sabe bien que de entre todas mis locuras ella es la más razonable, la menos poética pero si la más apasionante, la más estrujante, locuaz, inverosímil, irritante y desfogada.

¡Demonios mujer! Y es que tú eres ¡todo a la vez! me dejas en harapos, y vuelves a vestirme de ti.

y a pesar de todo mi “estrepitoso” camino recorrido, solo tengo vicios inservibles, pero el tuyo es inmenso, es irrevocable e insuperable por “ahora”, no sé si mañana lo siga teniendo, pero lo dije un día y lo recalco a hora, seré la chávela del presente llorándole a su Frida De hace tantos años.

‎y mi ego no es nada, solo soy vicios, demasiadas llamadas anónimas repitiendo un “abandono”, mis mejores manías y las únicas que mejor me salen, "Mis 7 Vicios Predilectos tienen que ver contigo, ¡No podría tener mejores!

1.-Pasar Mis Dedos Entre Tu Cabello
2.-Deslizar Mi Lengua Por Tu Ombligo
3.-Verte Dormir
4.-Besar Tus Ojos
5.-Olerte de pie a cabeza
6.-Memorizarme cada uno de tus gestos
7.-Embriagarme con tu sola presencia

Mi gran amor se ha resumido a muchos hombres y un par de mujeres, ¡y diré que UN PAR! Para que no te sientas tan sola con la imaginación.

Esta es una noche de fascinantes entelequias sobre mi lengua en la que no quiero desaparecer rastros de tu voz curtida, esta es la noche perfecta convertida en madrugada espeluznante, porque tu aroma suave ha viajado por las calles y se ha posado en mi nariz, y es un poco aterrador, saberte tan mía como de ”las demás”.

Y ¡Recalco! que esto de saberte mía, es como escribir al revés, es como comer por la nariz y tomar agua por los oídos, nada es como debe de ser, pero no interesa el modo, importa el resultado, y si no parece bueno a los ojos ciegos del mundo angustiado, es algo que sinceramente me tiene despreocupada,tanto como a un muerto le acongoja vivir.

Lo complicado de tu persona, me deja enferma, y me vuelve a sanar, y tu olor a tabaco por las noches me recuerda las noches crueles de cáncer pulmonar, y tu cotidiano olor a licor se me arrincona en las entrañas, y no me deja descanzar, me preocupas en las mañanas y en las noches tengo que salir a salvarte, ¡alimentamos nuestros malestares en cada copa y tarro anesteciador.

He conocido a una mujer que al tocarla me deja estropeada, he conocido a una mujer que me mata lentamente para después llevarme a la morgue, he conocido a una mujer que no pensé que pudiese ser, ¡no es francesa ni italiana! ¡Por todos los Santos! ¡Es española! Y con solo hacer chasquear sus castañuelas tiene el mando de mis movimientos!

Sus interminables parrandas que me desvelan aún en el desvelo mismo, que me dejan somnolienta y con ganas de más, una estrepitosa calamidad que llegó a recordarme que no importa de dónde, ni porqué, pero siempre hallaré la manera menos prudente para callar los besos que no existen, las frases que tengo que adivinar y los “mil perdones” que no siempre he de soportar.

La conocí en una noche de tantas, cuando me disponía a continuar, por el mismo bar, compañías aburridas, ¡aunque no tanto como yo!

Y estos sentimientos se supone que estaban en lista de espera, como todo en mi corta y jodida vida, “el amor y el arte hacen soportable mi existencia” ahora modifico la frase para terminar entre tus pechos, para revolcarme con tu lengua mientras tus manos se apresuran a navegar en un infinito charco de alucines.

He dejado de ser la muchacha con el vaso medio vacío para continuar desperdigando el agua a mi paso, para seguir pintando realidades mediocres y mal fundadas y fotografiar realidades que son tan ciertas como mi cansancio esta noche.

Y vamos caminando mientras te quejas de la vida, mientras el bendito tormento tantas veces te arrebata de mí, y tengo que hacerme a la idea en que resumiré mi vida en un par de días, que mis noches empiezan pensando en lo que no debo y olvidando lo que se supone es correcto.

Y conocí a una mujer, que a partir de esta noche se vuelve mi pudor abandonado.
¡yo no entiendo como dos mujeres pueden soportarse! Pero entiendo que a ti, te soportaría todos los años que me quedan aún déspues de muerta.

Conocí a una mujer a la que le tomo la mano en el día, a la que le beso la frente a las 12, a las 3 necesito volver a verla, y a las 8 comienzo a perseguir con la mirada, ¿cuando se nos acaba el día? Cuando termino dentro de sus sabanas, entrejuntando las manos y acariciando su cabello.

Y conocí a una mujer, que aún es, porque así me da el gusto y la gana de que sea, porque a diferencia de las otras, yo no soy lo que ellas pretenden dejar de ser, porque mi afortunada competencia no está en un cuerpo sino en la mente más astuta.

pero ¡vamos! ¿Quién podría ganarme? Quién podría tan solo en dos o tres frases hacerte el amor sin desnudarte? ¿quién podría compararse a mi? ¡Ego! así es caballeros, porque mi esfuerzo me ha costado! y Este es un placer, que yo y solo yo, puedo darte!

Yo no lo sé de cierto pero en tus ojos veo la tristeza que no he podido borrar, hoy, solo sé que en tí conocí a la mujer que me volvió menos prejuiciosa y más precavida ¡ahora sé más de la vida que cualquiera!

Y conocí a una mujer de mirada profunda, de actos sufribles, de verdades que me mienten y de mentiras que nunca me ocultarán la verdad.

Y conocí a una mujer que un día decidió amarme y desde ese entonces yo no hago más que adorarle fatigosamente.

Y conocí a una mujer que puede ponerme en un estrado para jurarle a las estirpes enteras, que un sentimiento así, no se ve, ni se escucha, es una belleza irremediable que nadie más podría percibir, porque ella atrapa mis suspiros para bebérselos en una copa de licor, y se fuma las malas rachas todas y de un jalón.

Hubo una vez hace muchas horas, que conocí a una mujer, que me saludo suavemente con los dedos y se despidió insertando su corazón junto al mío.

¡Brindo por ella! por ella y por ninguna, Brindo solo por ella, por la que sigue amarrada aquí, abajo y del lado izquierdo del corazón, brindo por la mujer que hay en mi vida, por la mujer de mi ahora, por la inevitable historia que me salpicará de aterrorizantes horas.

¡Brindo por una desconocida que ya he conocido bien! por la mujer que me dará el mejor de mis recuerdos.

¡Salud! por ella! irremediablemente ella será la única por quién invitaré una despedida tan dolorosa, que no sabremos como despedirnos pero tampoco tendremos planes de regresar.

jueves, 5 de agosto de 2010

En La Misma Cantina.


La puerta más grande que había visto.

La ventana más asfixiante en la que había respirado.

Mujeres, cantineras y cotizadas musas esperando por un hombre, y fui yo quién de un empujón paralizó las miradas.

Con los ojos hinchados, con las manos lastimadas, con la nariz perturbada, con los labios partidos y secos.

Entré sin pedir permiso.

Y así me sucedió los siguientes 4 años, día con día haciéndome amiga de cada mujerzuela que llegaba al mismo sitio.

Mes con mes bebiéndome hasta el último sorbo de cebada.

Como induciendo a la desgracia a que se revolcara con mi cordura, pero ¡Nada! No pasaba nada!, ni enfermedad, ni derrames, ni degollamientos, absolutamente nada!

Pero esta noche fue diferente, Esta noche no se compara a ninguna, esta noche bebiste de mi copa y me la sorrajaste en la cara, me pusiste en la rocola “EL Último Trago” de la insaciable Chabela y le pediste a la cantinera que me llevara una botella de Licor, de la más cara, de la más amarga, y dentro de ella, una nota arrugada y carcomida que decía:

“Esta noche me sentaré a dos butacas de ti, esta noche me reiré de tu dolor, esta noche te veré llorar Mi desprecio, Esta noche mientras tú Te despedazas por mí, yo me daré el lujo de llorar por alguien más.”

En ese preciso momento, me hice invisible, me sentí humillada y halagada al mismo tiempo, fue entonces que de un golpe se introdujo en mis entrañas, un revoltijo Detestable que me martirizó toda aquella “Interminable” noche.

-Pipa F.-



¡Qué Nostalgia Tan MOJIGANGA!

Después de una hermosa pausa en dónde las parrandas eran mi calma, ¡mire nadamas! que esta noche tuvo que envenenarme la añoranza que tan bien adiestrada la tenía.

¡Y No hubo, ni Habrá, Noche más triste, que esta jodida que se me escapa!

¡Tanto desgraciado destino y tuve que toparme con el peor de todos!

Estas cosas que son tan simples, son tantas señales que nos regala la vida y por confiados No las tomamos en cuenta.

Y vuelvo a caer, ¡Caramba! soy tan ordinaria.

Cuanto duele lo que ya pasó.

Tanto me pudo doler el pasado, que pensé haber desechado todo en aquellas noches de Diciembre.

Sigo pagando mis malas pasadas.

Temor de recaer en los vicios, de nuevo con las cosas queridas porque sigo pasando exactamente por lo mismo.

Y estoy despedazada, soñando un regreso que jamás sucederá.

¡Pérfida noche, Me dueles tanto!

Dudo mucho que pueda volver a querer, el mundo ha sido testigo de la sangre corriendo por las calles, sangre pasmosa y lo más gracioso es que, ¡TODOS SABÍAN QUE ERA DE ESTA POBRE INFELIZ!

Solo así, así de simple, En esta madrugada me limito a decir que estoy trastabillando a causa de tu recuerdo.

Esta puerta se me ha cerrado, ya hace tantos abriles que no veo las huellas de mis pasos.

y ¡Te tuve que encontrar, En la misma cantina!

En dónde encontraré a las mismas personas, las mismas copas vacías, la mesa tendida de barajas y de suertes que nunca me han dado fortuna.

Y ahora, ¡Justo ahora que me he quedado calva de tanto pensarte, resulta que te gustan las trenzas! ¡Eso fue tan injusto!

¡Qué desgraciada suerte tenemos las benditas mujeres!

Tan simple como eso, como que te devoras mi corazón una y otra vez.

Un Hermoso fracaso que el consuelo me brinda en esta vida decidida a ¡Terminar conmigo!.

Me parece mentira! que Justo Cuando Me Había Bebido La Última Copa, ¡Resulta Que Llegaste a la misma cantina! !En Dónde Cada Noche Te Llego A Llorar!

¡Me parece una burla! Que tengamos que sentarnos en la misma barra, en el mismo lugar, a la misma hora.

El mismo día que Yo te lloro a ti, Tú le lloras a alguien más.

ESTOS DEDOS QUE NO DEJAN DE LLORAR, Siguen sin nada que hacer, sin nada que decir, quizá me los debería mutilar.

La misma cantina viene escapando de la Tristeza, viene escapando del lloriqueo del corazón.

¡Y tú, mirándome como si te gustara revolcarte en mis ojos!.

Si sabes bien que te llevo en cada parte destrozada de mi cuerpo.

¿Por qué me sigues amarrando a tus pies?

¿Por qué me dejaste en medio de un Tirano recuerdo?

Y ahora que me había resignado, vienes devorándome con esas frases que jamás me dijiste en Vida.

“Que el amor es simple, y a las cosas simples las devora el tiempo” Eso dice VARGAS!

Pero, ¡Querida mía! ¡Señora de mis múltiples desconsuelos!

Lo que Usted no sabe de este hombre que he amado tanto es que ¡No es simple! Y ¡No es complejo! Este hombre Es un dolor inmenso que se ha acomodado en mis entrañas, que me ha aniquilado cada año y nisiquiera el viento llegó a soplar tan fuerte como para desvanecer de mi boca su silencio eterno.

Y Después de la Vigésima tercera ronda, ya veía nublado el pasillo.

Y comenzó El rasgueo del Mariachi, jamás te dirigí la mirada, me límitaba a sonreirle a los extraños que llegaban, no quería testigos, no quería sobornos ni licores pasados.

Eran casi 25 hombres los que te acompañaban, todos sufriendo por una mujer, y en medio de todos, Mi presencia reclamándole a cada uno, "La Desfachatez de Tus Actos".

¡Quisiera adorarte más para morirme de una vez!

¡Pero te sigo amando en medio, a la mitad de las frases, a la mitad de los reproches, no te Logro olvidar, pero Ah!! ¡Cómo te recuerdo!

Después de 7 días y 7 noches de no salir de la cantina, ninguno daba su brazo a torcer, todos callados como un duelo predestinado a fracasar.

Como un duelo con la vida, en dónde yo estuve muerta desde un principio.

¡Más Cebada! ¡Más Tequila! ¡Más Fracaso! ¡Más Gloria! y en la barra solo habían apuestas Y Una Bocanada de Mezcal.

Ya todos sabían nuestra historia, la ingenua dama, que se engatusó de un muchacho cualquiera, Un “cualquiera” que se topó en una noche de parranda, un “tipejo” que la elevó sin preguntarle si le temía a las alturas.

La historia de un hombre sin futuro que no sabía si el viernes era santo o si las mujeres eran sagradas.

Un canalla que después de haberla despedazado se dio el lujo de tirar sus pedazos en lugares separados.

Y sigo buscando mis partes, y sigo muriendo y cayéndome de par en par, la última pieza encontrada en esta cantina, y antes de recoger el pedazo que me faltaba, fue Justo en ese momento en el que "El tipejo" Gritó:

¡Vámonos! ¡Cerremos la cantina! Ya no hay motivo por el cual quedarme, ¡ENCONTRÉ SU CORAZÓN!
-Ahora sí, he acabado contigo- Me dijiste mientras llenabas un recipiente con "licor barato" , era momento de curtir mi existencia.

Mis ojos derretidos, los lugares vacios,No había más gente,No había más música, solo yo y mi Rídicula Amargura, solo mi ignorancia aplaudiéndome por haber fallado, ¡Una vez más!.

Un tiro de gracia por si acaso alguien intentaba resucitarme "Un beso que me hundió más allá del destierro mismo" No necesitaste tanto para destrozarme y fue así, que ya no quedó ¡Nada!

¡Y Me pareció mentira! que Justo Cuando Me Había Bebido La Última Copa, ¡Resulta Que Llegaste a la misma cantina! !En Dónde Cada Noche Te Llegué A Llorar!




l'écrivain: PiPa Fumatori ★





El Joven Viviente En El Cuadro: MOSCA (Gracias)

martes, 3 de agosto de 2010

¿Sabes Que Hay Allá Afuera?


Sí, Solo Viajes A Ningún Lado, Las cartas mal escritas A Unas cuantas líneas De La Demencia...

Y ¿Que es lo que más te duele de vivir sin llegar a ningún sitio?
-¿Qué me duele más? Es muy sencillo, quizá sean Las formas “Meramente inválidas” de vivir cuando no estás.-

Parada, sentada, muerta, viva, bailando, girando, mordiéndo, acariciando, lamiendo, perdonando y olvidando. Y después de vaciarme en “Motivos” he de Regresar al Principio.


-PiPa F.-


Lo más Patético es, La manera en la que Esta “Soledad” se acomoda sobre mis hombros, se sienta y se posa como queriendo que la arrulle.

Las veces que me quedo dormida mientras viajo y miro por la ventanilla, la misma ventanilla que nos trae al oído lo que no queremos escuchar.

Y el camino sigue las líneas, siguen sobre la carretera los mismos zumbidos y después de todo nos damos cuenta de que nada se ha quedado atrás, todo a seguido a la par, todo sigue corriendo, sostenido del mismísimo vicio.

¿Sabes que hay allá afuera?

Una serie de armonías que rigen la vida.

Una inmensa dicha que se ha tardado en visitarnos.

Un Diluvio inmenso de criaturas que no saben que existen.

Pero Nada de esto lo he podido ver.

¿Sabes que hay allá afuera? Me preguntaba una y otra vez.

Música que viaja alrededor de las encrucijadas, pregonando felicidad y destino inconcluso.

¿Sabes de dónde proviene la música? ¡De las veces que rebotan mis lágrimas contra el piso marchito! No! No! Creo que proviene de las resacas que no he podido aniquilar y aún están guardadas en mi enfermo interior.

¿Sabes de dónde proviene la Tristeza?

No sé de dónde proviene, pero sé cómo se siente, Como si millones de sentimientos viajaran sobre el alma, bajaran al corazón y lo inundaran de frases, métodos inservibles, remedios caseros y después de un rato, se desbordan por cada esquina del pecho.

Pero lo peor no es cuando sabes que existen, lo peor es cuando te miras a tí mismo, sentado, derrotado un poco menos que algo “inexistente” y entonces es cuando “La Invisible Tristeza” baja hasta el estómago y es precisamente ahí en donde ¡Te hechas a llorar!

¿Entonces, de dónde provienen los momentos cortos llenos de tranquilidad?

Sin lugar a dudas de los bostezos de un ángel, de la sonrisa de un viejo árbol o quizá y mejor aún, De los aletazos que da una mariposa.

Y sentí tanta emoción al escribirlo que un par de lágrimas se me han enjutando al corazón, Quiero a Alguien que se me empareje en las noches de lluvia.

Quiero a alguien que me detenga cuando necesite echarme a correr.

Son mil y un motivos para no parar de hacer lo que hago tan bien, Beber, beber y beber.

¡Déspues de todo! Cada quien es feliz a su manera.

¿Sabes que hay en cada esquina del exterior?

SÍ, siempre lo he sabido.

Es por eso que ya no salgo, es por eso que me escondo dejando que todos me vean desde dentro.

Mis hombros están “TAN CANSADOS”.

Mis hombros están colgando del techo y el tiraje me está desmembrando.

La parte blanda de mi alma esta en medio de la rudeza de mis pensamientos.

Un Recuerdo Que Nunca Se Fabricó, Un "Alguien" Que Jamás Habrá de encontrarme.

Absurdamente sigo Buscando la manera de encontrar un corazón.

Uno que viva dentro de mí, ¡Uno que deje de "Lloriquear" en medio de las parrandas!.

Que camine conmigo sobre las nubes, sobre las horas, sobre los cabellos de la mar, sobre la espalda de la luna.

Que disfrute las frases crueles, las noches de fandango y los viajes a ningún lado.

¿Cuál es el motivo de caminar sin parar? !Es tan sencillo! Quizá sea “Que la vida me vuelva a sorprender” Eso podría interpretarse como un motivo ¡Relévante!.

Y ya me he cansado de escribir, esta noche ya no tengo ganas de insultar.

¿Que Los dedos NO Pueden Llorar? ¿Que Bastardo ha dicho eso? yo lo reniego
¡Yo afirmo que Sí! Que los dedos Lloran cada noche y cuando son los de mi mano, tenemos que cubrirnos del aguacero.

Sí, todos tenemos cosas ocultas que nadie podría entender.

¿Sabes porque he decidido quedarme “Dentro” y no “Fuera”?

Si lo sé, allá afuera existen todos los sentimientos que sinceramente ya no quiero entender.

Allá afuera se alimentan todas las razones que se acurrucan sobre mis hombros, todos aquellos antipáticos momentos que tanto duelen recordar, es por eso que ya no quiero salir, solo por eso, porque allá afuera todo se resume a “Un Doloroso viaje que siempre nos mantuvo en el mismo sitio.”

y la trizteza esta noche se ha quedado "Pasmada" no hay descripción en lo absoluto que defina las cosas que siento, Pienso, Analizo y Describo.


Viajes A Ningún Lado, Las cartas mal escritas que llegaron a toda prisa para cobijarse con mis manos.

Infelices frases, ingratas respuestas, todas me tienen -A Unas cuantas líneas De La Demencia...-


l'écrivain: PiPa Fumatori ★