martes, 11 de mayo de 2010

Mujer De Tendedero.



Este pedazo de escrito se llama: "Mujer De Tendedero"

No tiene secuencia ni un fin común, solo es un poco de mierda de por aquí y manjares de por allá.


"Platicando con una “Iguana” descubrí, que era una mujer de tendedero, colgando, girando, soplada por el viento, con los pies despegados de la tierra e intentando suicidarme con un hilo de caramelo. Soy una mujer que prácticamente se sostiene del vacío, que sobrevivo con el oxigeno que me da el aleteo de los pájaros que se posan sobre mi cabeza." -Pipa-



He Comenzado.


¡DESTENDAMOS LOS MIEDOS! Y ¡QUE COMIENCE EL LLANTO! -Dije-


¡Joder! ahí viene de nuevo ¿qué viene de nuevo insensata mujer?
Escúchala, ahí está de nuevo, De nuevo esta dulce música, aferrándose a mis oídos
Repitiéndose como eructos de azufre con sal.

¡He comenzado a desvestirme una vez más!

No hay ningún hombre en mi vida, lo he intentado pero el resultado no es el que esperaba.
Me he acostado con tantos, pero ninguno resulto tan bueno

Una vez lo intente con una mujer pero, ¡caramba! Soy fanática de los hombres y sinceramente no resultó, lo lamento hermosa mujer, lamento haberte roto el corazón, como casi siempre lo hago, pensé que solo era una maldición para los hombres pero me doy cuenta que no, ¡lo lamento! pero ¿realmente creíste que funcionaria? Te lo advertí pequeña, de mis labios jamás pasarías, ¡por dios! He besado a mis cachorros qué más daba un beso fingido?

Lo intente, vaya que si, y ahora mi aposento es un deseo banal.

Y lo recito como si fuese poema, lo digo sin prenda alguna frente a esta nefasta chimenea, sin tapujos, sin preguntas, sin más basura encima de mi cuerpo.

En un inexistente personaje de palabras que me reprocha cada día el porqué de mis horas y el porqué de mis fraudes amorosos.

Lo sé, quizá vaya al infierno lo sé, pero como aún no creo que exista tal infierno, ronroneare por este mundo unos cuantos siglos más.

Sigo escuchando esa melodía procedente de no sé donde, pero es exquisita, sublime, ensordecedora, y a la vez tan suave, me tiene extasiada, me pone de buen humor cuando mi día es irrelevante.

Ahora que he decidido desechar todo, tengo que escupir todas las manifestaciones de dolor que pudiesen existir en mí, porque como alguna vez alguien lo dijo: “Siempre te has de convertir en lo que no quieres ser”…

¡Detesto! Detesto absolutamente a la gente mediocre y depresiva! Los detesto por inmaduros, por irrelevantes, caucásicos y por su manipulación con esa cara de victima que para ser honesta me provoca nauseas. Los detesto tanto que me comenzaba a convertir en uno de ellos.

Y ¿qué hay de los que me imitan? Que se aferran a mí, tratando de no olvidarme aunque digan que sí, JA, me vuelvo a reír, de ellas y de ellos que subestiman el poder del olvido, si te aferras a él, entonces él se aferrara a ti, es una lucha interminable.

Y sin premura alguna me he decidido a escribir esta noche. Solo estoy descartando la sensación de haberlo perdido todo.

Esta noche me he sentado sobre el techo para escribirle a una estúpida mujer. A mí.

Esta noche volví a ver "Amelie", con su cabello negro y lacio, esos ojos enormes que contagian al mundo de dulzura, se desvive por el mundo cuando ella no tiene uno propio.

Tanta Sincronía, vieja amiga, tanta que juraría estas relatando cada paso de mi vida.

Esta noche con el frio inminente de la ciudad más grande del mundo, me senté cerca de este hermoso cerro, con la ventana abierta y una taza de té, mientras duermes en el sofá te observo callado y precavido, a pesar de tu descanso se que sueñas conmigo, a pesar de tu delgada y preciosa figura, se que la única carrera que desearías ganar es la que te lleve directo a mi corazón.

Lo sé, también yo lo ando buscando, pero me temo querido novio, amigo, esposo, amante, hijo y padre, te apuesto que lo encontraras primero, porque tu logras lubricar mis rigidez con tus manos, con tus ojos y con cada palabra que me pones en las hojas de maple caídas.

El metro se vuelve más veloz cuando me apresuro a verte, amo pasar por su casa, y verla sentada ahí afuera, quieta y tan sincera, preciosa como siempre, con ese rostro de rectitud pero que a la vez refleja un inmenso odio hacía su gran amor, con ese par de ojos inmensos y las cejas más extrañas de la tierra.

A veces me siento cerca y recuesto mi cabeza sobre sus piernas, lloro un par de horas y le pido que me ayude a descifrarme, pero solo me acaricia la cabeza con sus yemas y me dice: “Tranquila pequeña, todo va a estar bien.”

Tú bien se lo dijiste a Diego, “Pies para que los quiero si tengo alas para volar”
¿Y si estas aves son de rapiña? ¿Y si me han cortado hasta la planta de los pies?
¿Cómo volar si he olvidado como se hace?

Lo sabré, cuando me aviente al precipicio, quiza sabré como hacerlo.

Pero ¡vamos! Mi señora, en tu casa azul esta noche y las que siguen, he vuelto a platicarte mi pena, y esta noche no estuviste, ¿fuiste a alimentar a tus pericos? O ¿quizá tus changos tenían tanto sueño que fuiste a arrullarlos?

No lo sé, pero hoy me pondré un smoking, me amarrare el cabello, me lastimare una pierna y cogeré un bastón. Me tomare una foto y se la dare a mi madre, ¡ella siempre quiso tener un varón!

O simplemente caminare sin prenda alguna por los pasillos, ¿qué más podría avergonzarme?

-He muerto por segunda vez- Escribí alguna vez, pero no fue así, no he muerto ni una sola, porque jamás he nacido.

No soy más que el bosquejo aún de lo que podría ser, el ensayo arrugado de lo que aún no es, demasiado desquiciante y enérgica como para ser un borrador, pero así lo es.


He matado por segunda vez, y no me arrepiento, ya alguien me lo dijo un 10 de mayo: alguien que me dejó saber que ser malo quizá no sea tan prejuicioso, alguien que no sé de donde venga ni a donde vaya, pero espero que siga andando por estos rumbos, que me dijo: “Déjame pensar por ti y tu dedícate a vivir”

Aroma con vainilla y arándano revuelto, que delicia de sabor, es la estufa que esta hirviéndome la madrugada, me he cansado del café, ya no me es grato por el momento.
pero volvera el gusto por él, lo sé, siempre regresa a mi.

Me he cansado del tabaco, ahora solo aspiro albahaca para deleitarme con el olor de la vejez de manera Elegante y discreta.

Hoy estoy muy cansada como para quejarme, ni de la vida ni de la muerte ni de lo que conozco y no conoceré.

Hoy estoy tan muerta como nunca lo he estado.

Hoy tengo tantas ganas de besar un millón de bocas y una más, tantas como sean posibles, pero al final como bien me lo dijiste, terminaria por no sentir nada.

Hoy simplemente tengo ganas de bailar hasta que la cebada que acumula mi cuerpo se me escurra de los ojos.

Galletas con canela espolvoreada, huelen tan bien, pero es una lástima que sea alérgica a la canela, que ironía, La canela es un remedio para el amor, es una fórmula infalible para los que desean una pisca de romanticismo, y yo, ¡Carajo! ¡demonios! ¡Soy alergica! me mataría tan solo tocarla. JA.

Hoy me rio, de ti y de ti, y de ti también, y de mí a veces y de la vecina loca ¡por dios! esa vecina que Silva todas las jodidas mañanas junto a mi ventana justo a las 5am cuando estoy comenzando a dormir, he pensado en matarla pero está demasiado obesa y podría lastimarme la espalda, así que, dejemos que las enfermedades hagan lo suyo.

Hoy simplemente mantengo mis pensamientos en una oruga que he dejado a un lado por mi estúpida enfermedad mental.

Hoy simplemente cultivare todos los pequeños placeres:

Meter la mano en un costal de cereal crujiente,hacer rebotar piedras sobre algún hermoso río,expander burbujas de jabón por toda mi habitación,caminar descalza mientras como helado de vainilla,comer dulces hasta que me rechinene los dientes,escuchar el corcho del vino y despues pegarme resistol en las manos para despues desprenderme la cobertura, ah! y sobre todo,subir una cobija al tejado mientras veo las estrellas y despues beberme la lluvia.

Por aquellos textos optimistas que hace algunos años eran mi sustento, pero lamentablemente el lado oscuro de mi ser, se apodero del optimismo y me convirtió en un charco de tragedia.

Que victima soné, ¡que ridiculez! Ahora bien, pensare en cuantos escritos tengo bajo la manga, todos con un porqué, y un para que, ya es el día siguiente, ya es media noche más 19 minutos, y ahora, solo tengo que dormir, y sin embargo, me da tanta pereza hacerlo.

Si has de pensar por mí, al menos déjame saber que pensaras, prometo no omitir comentarios, pero los veredictos anónimos siempre me cosquillean la curiosidad.

¿Lo ve? Me he vuelto un poco más loca que ayer, creo que es por el sedante, o por las horas que he viajado, aún no lo sé, estas luces inmensas de esta decadente pero enorme ciudad están dejándome ciega.

He pensado en el aspecto de eso que no puedo descifrar y creo que todo se resume a humo de tabaco revuelto con cajeta, mezclado, achicharrado y acitronado con licor barato, de ese que te deja una cruda de 3 días.

Soy una alcohólica que fuma cuando más se lo prohíben y esta noche de ¡mierda dulce! He de contar 2 semanas y 3 días sin estar ebria ni escupir humo.

Mérito para quien no lo merece, ¡vaya! ¿Un plauso al menos?

Soy un personaje que vive con la premura de la calma y que reza dos veces al año pensando en que la primera quizá lo hizo mal. JA.

Esta noche no hay nada relacionado con las palabras que he plasmado, lee de nuevo, nada tiene sentido y sin embargo, todo es cierto. Hoy estoy aquí, sin prenda alguna para empezar a ponerme piel de oveja encima de este esqueleto.

¿Qué hacemos? ¿Continuo? O ¿detengo estos empedernidos dedos?, pero, lo peor no son los dedos, porque podría cortármelos y se acabaría el mal, el problema es la mente, esta que se sitúa dentro de mi cráneo.

¿Qué hacer? Porque, Recordemos que ya no puedo pensar más, solo dedicarme a vivir.
Entonces, si no hay más que agregar, con su permiso caballero y dama.


¡DESTENDAMOS LOS MIEDOS Y QUE COMIENCE EL LLANTO!



l'écrivain: PiPa Fumatori ★

3 comentarios:

  1. Yo no soy una mujer de tendedero, propiamente dicho...pero podría tenderme muchos ratos a que me diera el aire...leyendo sin serenidad lo que escribes.

    Besos guapa.

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  2. Muchas mujeres han tenido abortos y sus vidas siguen,deja las drogas,todas.Muchacha triste, siempre con ojeras,no ves que nunca has sido feliz?

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Se Fuman Mis Ojeras.