viernes, 14 de mayo de 2010

Dolores Voluntarios A La Mitad De Mi Corazón.



Esta es una lágrima humana, envenenada con el filo de mis dedos, porque ya no podemos amarnos más como alguna vez lo soñamos.


En estos últimos momentos de mi no tan larga existencia, he llegado a la conclusión de que he olvidado como olvidarte.

Porque me aferro a la sincronía de tus pasos como siempre ha sido.

Porque no podemos evitarlo y al menos por mi parte no lo haré.

Porque hemos cruzado mares y océanos infinitos solo para vernos a los ojos.
Y no divagues, no lo hagas, porque serías un embustero al decirme que no mueres por correr hacía mi y sin dirigirme palabra alguna, dejar que el mundo se consuma en su rabia y en la envidia característica.

Porque nadie sabría con certeza de que hablamos, porque la belleza del instante es ahora.

Porque así como las flores se salpican de lluvia de sol, mientras la desvanecida luna aún se está guardando, así consumo día a día tus recuerdos que no se mueren y en cambio se van regenerando Y tomando más fuerza.

Es mentira que se olvida con los años. Muy cierto y comprobado está.

Nada de eso se olvida, solo se reafirma, se hace añejo y más fuerte, tanto que podríamos hacer una lápida con nuestro nombre y se volvería ceniza al contacto con Dios.

Porque ya no quiero ansiarte tanto si no has de poder ansiarme.

Porque no quiero desesperarme más, si no has de poder recuperarme.

Porque no quiero necesitarte, porque mientras más lo hago menos puedo tenerte.
No puedo tenerte porque tú no me puedes necesitar.

Quiero dejar de gritarte si no estás dispuesto a contestarme.

Y por más que pase el viento resbalando por la fragancia de mis cabellos, no podre entender el pago de este pecado que no tiene culpa.

Porque no podre saber, ¿Qué paso? porqué no pudimos amarnos como quisimos. Hasta el final del comienzo, hasta el comienzo mismo de las cosas que nunca empiezan.

Y por esta ridícula, enfermiza, obsesionada, triste y mediocre manera de escribir mía, tan particular que siempre termina por escribirte a tí.

Porque no hay motivos del porque no hay murciélagos con visibilidad, quizá serían menos estúpidos si se enamoraran del sol.

La historia de la esperanza consumada y dividida en átomos que al final siempre se han de encontrar.

He notado que estamos callados porque estamos muertos, porque solo nosotros escuchamos los pensamientos, y los demás giran como un giroscopio alucinógeno de algo que no es real.

Porque la vida gira en nuestro entorno a través de millones de años, porque no se que de cierto sea, que hay más vidas después de esta, pero se de cierto que así es cuando se trata de encontrarnos y lo peor no será encontrarte miles de veces en diferentes edades y formas, lo peor no será ver tu sonrisa en cada vida, lo peor no será saber que nos encontraremos de nuevo y me harás el amor otra vez, lo peor será saber con certeza que, ¡jamás! En ninguna de esas vidas, podre tenerte, no podremos envejecer juntos ni morir con las manos sobre el corazón. Eso es lo que más me aterra de vivir.

¿Cuando fue que mi cuerpo se consumió que no me di cuenta?
Y veo esta tumba interminable y no veo alguna flor resbalar de tus manos. Ni lagrimas ni aullidos de silencio.

Y te he de amar, porque es la magia inversa convertida en estrofa, una tregua con la muerte, le juré que si me hacía regresar a tí, le daría cada uno de mis huesos para que se hiciera una peineta en la noche de nuestro último encuentro, imaginario y discreto.

¡Maldita sea! ¡Por piedad! ¡Por Piedad! ¡Te gritaba!, el semáforo se puso en verde y esperé con tantas ganas a que te bajaras, a que corrieras hacia mí, sin importarte nada, solo el amor que estaba succionandome el espíritu que aún me quedaba, la fuerza con la que sostenía ese volante de vida, la saliva atorada en mi garganta deseando llorarte hasta impregnarte los ojos de amor.

Pero decidiste quedarte en tu dolor, así que lo supe, y opte por virar a la izquierda, mientras tú, te limitaste a llorar.

Que triste y aficionada es la vida.

Pero así tuvo que ser, sin poder decir más, así tuvo que ser, así es como se conservan las más grandes e inolvidables historias que se construyen.

Claro que leí esa frase muchas veces del, "No Te Amo" ya la había leído antes de que la escribieras, y la supe aún cuando estábamos juntos, pero prefería seguirte el paso, esperando que algún día cambiaras de parecer, y me dijeras que ya habías logrado amarme.

Pero no fue así ni desde un principio y mucho menos en el final.

Yo elegí no hacerlo, al ver que no había más por amar, que no había ningún motivo por el cual hacerlo, ya no, porque ya no había nada dentro de ese cuerpo.

“Esta clase de certezas se presenta solo una vez en la vida”, Una vez leí eso en alguna parte, y cuánta razón tenían.

Terminé por beberme estas lagrimas que ya me sabían tan dulces, pero al final del camino, las jodidas me provocaron un cáncer terrible en el estómago.

Y a pesar de que estoy muriendo físicamente, me limito a argumentar mis malestares con simples dolencias comunes, porque ya nadie sabe lo que me pasa, porque esa es la verdad del asunto, que moriré quizá en 3 o 4 años, pensando lamentándome el porqué de las cosas tan simples pueden dolerme tanto, ¿porque siempre ha sido así?

Opino lo mismo que ellos:
“El amor no obedece a nuestras esperanzas, su misterio es puro y absoluto, lo que tú y yo teníamos no hubiese podido continuar de haber estado juntos, pero cuanto deseaba compartirlo, como hubiesen cambiado nuestras vidas, de haber obedecido a nuestros impulsos, ¿podría alguien más haber visto toda esa belleza?”

Y te extraño tanto cada noche como esta que comienza
Y lo sigo haciendo a pesar de que dije que no, pero es insoportable caminar por esta gran ciudad tratando de escapar, no sé de qué, pero así es.
Y sigo ansiando tanto que la muerte me dé un consuelo o me diga de un solo tajo que no me queda más.

Porque se de cierto que, extrañarte aún, esta envejeciendome las canas, más y constantemente que la primera vez.

Porque vuelvo a ser infeliz, sin emociones ni pasados entendibles.

Porque siguen recorriendo mi cuerpo manos que no deseo, que ya he mutilado para no sentirlas más, sin trovador ni esperanza, sin alas en los pies, como las que alguna vez tuve.

Como cada noche decido empezar a ser feliz, solo espero aprueben mi petición en el cielo y puedan darme un incentivo por tanta y tanta miseria.

Jamás lo noté, pero creo que al final me convertí en espuma de mar, inherente y caudalosa que se mete entre la yema de los dedos, acaricia y en dos segundos se esfuma de ti.

Ay! Amigo de tanto tiempo, tan azul y escurridizo, con matices por todos lados, el que me salvó de una muerte segura hace muchos años. ¿Que don me has dado? O ¿Qué maldición arrastré de tus aguas muertas? Pero te lo agradezco, me recalcas cada día que estoy más viva que un ermitaño, más viva que un arrecife de corales, un poco más viva que tú y que yo juntos.

Ya pasara de estas manos, ya secaran las ampollas y se marcharan los llantos cobijados por mis ojeras.

Nuestra historia de utópico amor, duele cruel pero a la vez dulcemente,cuando se que, eres tú el único que podría entenderlo.

Y si alguna vez, dos amantes tuvieran la dicha que tuvimos tú y yo al conocernos, si tuvieran la desgracia de perderse y tener una vez más la oportunidad de recuperarse, les imploro que no la tomen, porque sería desgastar anticipadamente la oportunidad de eternizarse, solo una vez en la vida tenemos la oportunidad de vivir algo tan intenso, así que no la desperdicien, así como tú y yo, no lo hicimos.

Ahora estamos juntos con el cuerpo separado, juntos con los ojos puestos en alguien más, juntos aún con las ansias predispuestas al fracaso, Juntos como así sé que será, por mucho tiempo, hasta que alguien sustituya la historia de estos cansados cuerpos.

Perdón, me he equivocado, ya no estamos juntos, solo hemos de compartir el mismo sentimiento por las letras y por las vidas complicadas, Lagrimas para las edades, y hemos de compartir lo que nadie nos ha enseñado: “a sufrir en vano.”


Paredes implacables, suspiros arrepentidos, dolores voluntarios que todavía mantienen la naturaleza de mi escencia a la mitad de mi corazón.




l'écrivain: PiPa Fumatori ★

2 comentarios:

  1. nunka dejaremos de ser lo q somos por mas que queramos ser algo diferente. siempre siempre terminamos aki, tu con tus letras aki, yo talvez en alguna libreta cualkiera, en mi MF, en mi blog, en mi propia mente ya muy estropeada pero siempre terminaremos confesando ante las palabras q nuestros dedos escupen toda la realidad q nos ha tocado presenciar... todo lo sabes Iuni absolutamente todo lo q soy y lo q siento, me aterra q lo sepas tan bien aun cuando yo no digo mucho.. bendigo el dia en q t conoci y al fin pude encontrar a alguien como yo y saber q no estaba loko y sentir por primera vez en toda mi vida q la vida tenia sentido tal cual sucedia, te amé mas q a mis propias convicciones y eso es mas d lo q yo t pueda explikar y ese amor me fue matando al punto d estar simplemnte ausente de la realidad. esto q vez iuni sabes bien q ya no soy yo, solo el boskejo d un capricho de la vida. yo kede en algun lugar en la ya creada historia, pero mis letras aun siguen aki, como siempre como un estupido latido de un corazon q se rehusa a morir conmigo.. no dejes de escuchar ese latido, ya nadie mas lo escucha

    ResponderEliminar
  2. Estoy impactado con tus letras.
    fascinado
    idiotizado
    enamorado por no exagerar
    lleno de dudas respecto a ti
    y preguntandome si eres real

    revivi de un solo golpe al leerte.

    como puedo asombrarme de alguien que dudo exista?

    ResponderEliminar

Se Fuman Mis Ojeras.